Aprendiendo aikido con alegría

Debes practicar siempre con el espiritu de alegría
O’Sensei en Budo

El placer de enseñar, la alegría de aprender
Rogelio Carrillo Penso

Sólo aprendo para estar contento. Quien aprende para estar contento es espiritualmente rico, mientras que quien no aprende para estar contento es espiritualmente pobre, aunque sea materialmente rico.
Dice una única inscripción en el Tsukubai, el lavamanos de piedra de la Casa del Té por Mitsukumi Tokugawa (1628-1700), un señor feudal y recopilador de la gran historia de Japón conocida por Dai-Nippon-shi

Hoy en día la mayoría de los que practicamos aikido lo hacemos por varios motivos, casi siempre después de una intensa jornada laboral, universitaria o escolar.  O sea que si preferimos acercarnos al dojo para entrenar y sudar a estar echados en un cómodo sofá viendo la tele para relajarnos de nuestro estresado día, tiene que haber algo más que caer, prestar nuestro cuerpo para que nos luxen los brazos o recibir golpes y hacerle lo mismo a un compañero.

La mejor forma para relajarnos aparte de un buen ejercicio físico es la de disfrutar de un ambiente divertido en forma de juegos. Nuestro maestro es un especialista para no sólo hacernos olvidar todos los problemas del día regalándonos unas clases de aikido donde la risa a carcajadas, lo mejor para la salud, nunca falta, sino que a la vez controla que nuestro ego no aflore por medio de ejercicios específicos. Me gustaría compartir con ustedes algunos de los juegos que recuerdo haber hecho en estas clases tan especiales.

Formamos grupos de aprox 6 a 8 personas, uno manteniendo el jo como si fuera un palo de billar, otro hace de bola blanca con un protector en la espalda, el resto son bolas y todas las bolas tienen los ojos cerrados. El jugador con su jo toca la blanca empujándola contra las otras bolas, ésta se mueve según fuerza del toque y en la dirección de éste y las demás bolas completamente relajadas y mudas se mueven según los toque la bola blanca, tener en cuenta que una bola de billar no piensa, va hacia donde la empujan. Nos cambiamos para que a todos nos toque ser el jugador y la bola blanca. El sentido de este juego es practicar la distancia con el jo y que nadie es mejor que otro dentro del dojo, todos somos simples bolas.

Un ejercicio para adquirir confianza en nuestro compañeros es haciendo de trompo con los ojos cerrados dentro de un circulo de varias personas sin mover los pies, nuestro compañeros nos van empujando hacia él de enfrente o hacia él de al lado, los que forman el círculo deben estar atentos a recogernos y volver a empujarnos. Tratar de relajarse y confiar porque lo único que te puede pasar es caerte sobre la colchoneta.

Uke y tori se mueven como lo haría un borracho, completamente relajados los dos y cayendo uno encima del otro, levantándose con el contacto y volviendo a caer. Nos enseña a utilizar el cuerpo completo y relajado para defendernos y la coordinación y el contacto con el compañero de entrenamiento.

Otro ejercicio para relajarnos completamente es que el compañero nos agarre de los hombros(katadori) y nos sacuda de modo que el movimiento llegue hasta nuestros pies.

Uke ataca por ej. en shomenuchi y desde que hay contacto con tori uke debe gritar, este sonido debe ser constante y durar lo que dure el contacto entre ambos. El grito no debe perder fuerza mientras dure la técnica. Sirve para perder la vergüenza delante de los compañeros en el dojo.

Un excelente ejemplo que nos recuerda sensei del contacto que siempre debemos mantener con el compañero es igual al de mantener una pelota bajo el agua y ella intentando subir.

Hace tiempo que llevo una pelota de playa en el portabultos de mi coche, es por si repetimos esta superclase:

El intercambio de la pelota con tu compañero se transformó en un ejercicio de Aikido: piernas y brazos semi flexionados y caderas a la altura de los hombros, tirar la pelota mediana suave y relajadamente como cuando practicamos y si la pelota es más pequeña cogerla como si fuera un bokken.

Los ejercicios con la pelota nos muestran nuestra ansiedad de tenerla o tirarla dependiendo lo que ésta esté representando, por ejemplo:

En un ejercicio la pelota contenía todo lo negativo por lo que debíamos deshacernos de ella apenas haberla cogido para tirársela al primero que tuvierámos delante, a nadie le gusta quedarse con algo negativo, asique la pelota siempre estaba en el aire.

Dos grupos en el suelo y llevar la pelotita por el suelo a la puerta del grupo contrario, valian los bloqueos y esto nos enseñó nuestro empeño de ganar, no había forma de cojer la pelota, el que la tenía no la soltaba, algo en lo que hay que trabajar. Mentalizarnos que se trata sólo de un juego.

Formamos un circulo con una persona en el medio, había que tirarle la pelota al compañero del otro lado intentado darle al del medio y éste debía esquivarla, activa la rapidez de reacción. Luego tirársela al del medio y éste con otra debajo del brazo o con un bokken debia utilizar su mano libre en forma de bokken.

En suwariwaza practicamos ukemis de forma que el del centro debía dejarse caer al tirar la pelota, también repetimos lo de esquivarla, los del circulo debían pasar la pelota al del frente y tratar de darle al del centro, esto con tres pelotas al mismo tiempo.

Cogiendo la pelota con ambas manos y kokyunage a uke, que potencia.., no hay otra forma de hacerlo que empleando todo el cuerpo.

Y para finalizar a veces nos deja a las mujeres desquitarnos dándole cachetones a los chicos, porpuesto que luego los chicos tienen el mismo derecho. El maestro dice que estos golpes de nuestras manos en la cara de los compañeros es buenísimo para el cutis, será un nuevo método para mantener nuestra cara más jovén? nuestro maestro debería patentarlo.

Lo que está clarisimo que nuestras risas en estas clases tan memorables sí que son una forma de mantenernos como chiquillos!

Carina

La traducción al inglés en Aikido Academy USA
la traducción al alemán en Wir trainieren Aikido

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