Porqué tanta prisa

La naturaleza no tiene prisa, sin embargo todo se completa.
Lao Tzu

No tengas prisa, no te preocupes. Estás aquí para una corta visita. Así que asegúrate de parar y disfrutar del olor de las flores
Walter C. Hagen

Solamente aquellos que tengan la paciencia de hacer a la perfección lo trivial, podrán adquirir el hábito de ejecutar lo difícil con facilidad.
Friedrich von Schiller

581590_10151091801753873_1493442441_n

Mucha gente vive estresada, todo el día corriendo de un lado al otro, están los que abarcan más en un día de lo que un ser humano puede realizar, también están aquellos que no se saben organizar y hacen el mismo camino varias veces, sin pensar que se podría haber hecho tal vez todo de una sóla vez, están los faltos de memoria y por ello cuando se acuerdan les queda poco tiempo para terminar su objetivo e infinidad de diferentes casos más.

Nunca les ha pasado que un coche los adelanta a más velocidad que la permitida, pero que a lo largo de la ruta lo vuelven a encontrar, quizas en algún atasco. Yo creo que con prisa y sin ella llegaremos al mismo tiempo y por lo menos más seguros, lo importante es poder llegar y más importante es disfrutar del viaje.

La vida ya pasa demasiado de prisa, cuando estaba en el colegio el tiempo duraba una eternidad, parecía que las ansiadas vacaciones de verano no llegaban nunca. Pero ya adultos y en la vida laboral, la semana pasa en un plis plas, hoy es lunes y mañana ya es viernes y del fin de semana mejor no hablar.

Cuando todo es normal, estamos bien de salud, nuestros seres queridos están sanos, tenemos trabajo, podemos entrenar no nos damos cuenta de lo afortunados que somos. Lamentablemente recien nos ponemos a pensar en lo bien que estábamos cuando perdemos algo de lo anterior. Porqué el ser humano en lugar de estar agradecido por una vida «normal» siempre anhela más, busca una felicidad ficticia, no se da cuenta de lo feliz que es en realidad en el momento, hasta que alguna parte de su normalidad se pierde.

Cómo dice Walter C. Hagen en la segunda cita arriba estamos aquí por una corta visita, asique porque no disfrutamos del perfume de las flores sin tener prisa ni preocuparnos. Disfrutemos de cada mañana simplemente agradecidos Por estar vivos! y ansiosos de lo que nos deparará el día.

Todo esto también lo podemos aplicar al aikido, he tenido compañeros que han estado algunos meses y han desaparecido, tal vez viendo la dificultad y lo lento que se avanza les quitó los ganas de seguir y buscaron un arte marcial donde se avanza más de prisa. Y lo que deben tener en cuenta y sabemos los que lo practicamos durante muchos años, que en Aikido no podemos tener prisa, no es fácil, no te darán un cinturón negro en pocos meses, y como defensa personal hay otras artes marciales cuya efectividad se puede aprender en menos tiempo.

El aikido es un arte marcial dificil de aprender, hay que olvidarse de la fuerza, entender las técnicas, utilizar el cuerpo en conjunto como un bloque desde el centro, las caderas, aprovechar el ataque del oponente, son muchísimos los detalles a tener en cuenta, que al principio cuesta mucho. Los detalles los vamos viendo poco a poco a medida que avanzamos. Hasta el cinturón negro o primer dan estamos tan ocupados en aprender cada técnica, por asi decirlo de la vista exterior, que no nos damos cuenta de los detalles ocultos, los cuales empiezan a tener sentido a medida que vamos avanzando, pasos a paso iremos descubriendo el interior, los engranajes y pequeñas piezas más importantes para que nuestro aikido funcione incluso contra un oponente fisicamente superior.

Cómo dije Aikido es dificil, pero un reto para toda la vida que merece la pena, justamente las cosas dificiles son las que nos hacen sentir mucho mejor cuando tenemos el firme propósito de aprenderlas y vemos como somos capaces de lograrlas, parece que a nosotros los aikidokas nos gustan los retos

Los martes y jueves cuando nos desplazamos a Vecindario hacia el dojo siempre nos hacemos la pregunta: que nos traerá el maestro hoy, con que nos sorprenderá y nunca, nunca nos defrauda, siempre salimos cansados, sudados, relajados, habiéndonos reído y disfrutado al máximo, listos para la ducha, cena y la cama. Y lo mejor hemos dado otro paso feliz en el viaje interminable de nuestro Aikido.

Carina

Please read this article in english in Aikido Academy USA

Bitte lese diesen Artikel auf Deutsch in Wir trainieren Aikido

Share