Handan, en japonés, significa «un juicio, una decisión o una interpretación». Esto difiere de hanketsu, una decisión judicial, o una frase. Ciertamente, no es similar a Tenbatsu, o «la venganza del cielo, o un castigo divino».
Para sobrevivir, tenemos que aprender a discriminar entre las cosas, las situaciones, las intenciones y significados, que nos pueden beneficiar o dañar. Estas lecciones de supervivencia tienden a permanecer con nosotros durante la totalidad de nuestras vidas, y rara vez se someten a un examen periódico o un autoexamen para ver si siguen siendo válidas.
Debemos tener el coraje, la experiencia y la voluntad para tomar decisiones difíciles, muy a menudo de un momento a otro. También debemos desarrollar la sabiduría y la flexibilidad en el pensamiento y sentimiento, para corregir cualquier malentendido que hacemos, o se hace sobre nosotros. Aquí se aplica la humildad apropiada, ya que nos mantenemos fieles a nuestras convicciones, pero permanecemos abiertos a nueva información y a hacer los cambios necesarios en nuestras percepciones, y en nuestros juicios.
Recuerdo un incidente reciente, donde un inminente y muy respetado sensei de Aikido cometió, en mi opinión, una violación de la confianza indigna de su reputación y de su carácter. Esto parece tan absolutamente fuera de lugar, y contrasta con la asombrosa historia del pensamiento correcto y la acción de este hombre, que me sorprendió.
Sin embargo, fue mi derecho de juzgar a esta persona y a este acto, revertiendo toda mi buena voluntad y apoyo positivo a este hombre y su condición de líder indiscutible en Aikido, para siempre? ¿No están mis pies hechos de una arcilla similar a la de todos los demás ? ¿Realmente tenía suficientes hechos y puntos de vista para juzgar adecuadamente tanto el escenario y las acciones de la persona? Incluso si lo hacia, fue la mejor aplicación de los principios Aiki que profeso para defender y que sigo?
¿Con qué frecuencia durante mis 56 años de entrenamiento en Aikido he encontrado casos similares donde el comportamiento no coincide con el «pensamiento correcto» y «acción correcta». ¿Con qué frecuencia en realidad, he sido culpable de no ser fiel a los principios que digo defender, y que he demostrado ser demasiado humano también en el recuento final, que inevitablemente resulta.
«No juzguéis vosotros, y no seráis juzgados», es una frase que recuerdo. Sin embargo, en el acto mismo de ejercer un juicio, hay mucho que aprender tanto de la tentativa, y de las revelaciones que resultan, tanto en lo personal y de otra forma. Puedo arrepentirme de mi errores, pero valoro mis conclusiones, y las nuevas ideas que gané.
El uso apropiado del «juicio», en cualquier caso o causa, es un escenario «único en su tipo» , donde las partes involucradas tienen que ser tan cuidadosas y respetuosas, no sólo de lo que se conoce, pero de lo que no se conoce, o cognoscible. Se trata de un curso, una vez puesto, es casi imposible de corregir o deshacer. Puede tener consecuencias imprevistas, que pueden presagiar malos entendidos aún más, acciones inapropiadas, y fomentar juicios adicionales desafortunados.
Es mi elección de mantener el ma-ai adecuado, comprometerme a corregir el Shisei, y ejercer el adecuado sonkei y nasake, manteniendo mi relación y Reigi intactos. Esta situación, y este maravilloso sensei, no se merece menos de mí.
También es mi elección de permanecer siempre alerta, así como comprender, cada vez que ocurren hechos similares, confiando en que mi sabiduría acumulada me guiará entonces.
En la Unidad
Francis Y Takahashi
Traducción Carina
Fuente: Aikido Academy USA
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