El aikido pierde al Maestro Tamura

Eduardo J. Hernández Pérez
Puerto de la Cruz

El Maestro de aikido Nobuyoshi Tamura, uno de los referentes más importantes de esta arte marcial en todo el mundo, falleció en Francia a principios de julio (viernes 9). Tranquilo y sereno, a pesar de su enfermedad, pasó sus últimos momentos en compañía de su esposa Rumiko Tamura, sus hijos y alguno de sus allegados. Su desaparición ha llenado de tristeza a toda la comunidad internacional de practicantes de aikido.

Su sonrisa de bienvenida y su fina y pequeña silueta fueron siempre reconocidas por los practicantes de todo el mundo, que se acercaron a recibir sus enseñanzas. Lo mismo que su peculiar mirada de águila y su extraordinaria virtuosidad técnica de la que hacía gala. El aikido del Maestro Tamura siempre se presentaba rápido, sutil y extremadamente marcial.

Después de casi 60 años practicando y difundiendo el aikido, su técnica era tan pulida que todos los movimientos superficiales habían desaparecido, no dejando transparente más que la esencia de su arte en gestos sutiles, aunque llenos de transmisión y enseñanza.

España tuvo la fortuna de poder beneficiarse de su presencia desde los comienzos de esta arte marcial en nuestro país. Fue en el año 1.968, cuando se tuvo la primera noticia a partir de la organización de una exhibición impartida por el maestro Tamura en el Palacio de los Deportes de Madrid (promovida por el diario deportivo Marca), que un grupo de algunos de los primeros practicantes de aikido españoles contactan con el maestro a través de lo que era en aquel momento el Departamento de Aikido de la Federación Española de Judo y Disciplinas Asociadas (FEJyDA). El Maestro Tamura explicó su compromiso y establecimiento en Francia, y ofreció, no obstante, su colaboración para dirigir el aikido en España con la fórmula de stages periódicos, que le darían a él la oportunidad de asesorar y corregir y a los practicantes españoles la manera de progresar adecuadamente, por lo que se convirtió en el director técnico y asesor del Departamento de Aikido de la Federación Española de Judo y Disciplinas Asociadas. Con tal compromiso viajó frecuentemente a España a impartir seminarios inolvidables de dos semanas de duración en sesiones de mañana y tarde, además del tradicional curso anual en San Sebastián, organizado por la Asociación Cultural de Aikido francesa.

En el año 1.976, por diferentes condicionantes, entre los que estaban los numerosos compromisos internacionales del maestro, unidos a la expansión del aikido en Europa, y por otro lado, la falta de colaboración e interés de algunos de los dirigentes en aquel momento de la FEJyDA, se perdieron temporalmente los contactos enriquecedores de su presencia, por lo que un grupo determinante de sus alumnos españoles decidió, con el beneplácito de la leyes vigentes, crear una asociación que, bajo su dirección técnica, continuaría la práctica del aikido con arreglo a su método y enseñanza. Este grupo se formalizaría algunos años después en la Asociación Española de Técnicos de Aikido, en la actualidad Aikikai de España, convirtiéndose en un grupo referente en nuestro país, reconocido en Europa y autorizado y respetado en el Centro Mundial de Aikido de Tokio, indiscutiblemente gracias a la presencia y apoyo que siempre ofreció el Maestro Tamura. Durante todos estos años mantuvo su cercanía permanente con los cursos que, al menos una vez al año, venía impartiendo en diversos lugares de la geografía española: de Santander a Granada, pasando por Palma de Mallorca, Barcelona, Alicante, Zaragoza, León, Cuenca, etc… y en los últimos años, en Madrid. Además, como complemento a esta tarea, encomendó también desde hacia muchos años a algunos de sus mejores alumnos -Tomás Sánchez 6º Dan (responsable en España); Claude Pellerin 7º Dan; Gilbert Milliat 7º Dan; Jean Paul Avy 7º Dan; Michel Prouveze 6º Dan, entre otros- la dirección de cursos, atendiendo a la formación de profesores y a la propia formación técnica, en un reiterado ciclo de carácter anual.

Por otro lado, fueron muchos también los aikidokas españoles que le siguieron de forma regular en sus cursos organizados en Francia, Italia, Portugal y otros puntos de Europa.
Nobuyoshi Tamura Sensei
Nació el 2 de Marzo de 1933 en Osaka (Japón). Era 8º Dan de Aikido y responsable técnico (shihan), otorgado por el Centro Mundial de Aikido (Aikikai Hombu Dojo) de Tokio (Japón), donde estudió durante más de una década bajo la atenta dirección del propio fundador de esta arte marcial, Morihei Ueshiba. El Maestro Tamura ocupó en esa época un lugar preeminente en el pequeño grupo de Uchi-deshi (estudiantes interinos, próximos al fundador) que años más tarde tendría el compromiso de representar el aikido en el mundo y particularmente por Europa y los Estados Unidos. Establecido en Marsella, al sur de Francia, donde residía desde hacía 46 años, centró parte de sus inquietudes en el funcionamiento de la ENA (Escuela Nacional de Aikido) que se ubicó en la marsellesa localidad de Bras, para, desde allí, dirigir su enseñanza y compartirla con otros puntos del planeta. Fue autor de varios libros dedicados a la metodología de la enseñanza del aikido y a su práctica (uno de los cuales, y quizás el más significativo, Aikido Etiqueta y Transmisión se edita en España, en 2002). Fue así mismo elemento esencial en la expansión y reconocimiento de la Fédération Française d’Aïkido et Budo (FFAB) y en España de la Asociación Española de Técnicos de Aikido (con representación en Tenerife en la Asociación Cultural Takemusu Dojo). El Maestro Tamura nos dejó a todos los que le reconocimos como un referente y nos envolvió, con su influencia en el arte del aikido, un extraordinario tesoro, que podría, entre tantos, condensarse en uno de sus deseos: «El aikido es una vía que permite descubrirse a sí mismo y construirse como ser humano con el fin de vivir una vida plena y feliz. Espero que encuentren buena salud y vivan dichosos. Que descubran el camino de la felicidad y que puedan volver sobre su vida en el momento de morir y decirse a sí mismos que ha valido la pena. Es lo que yo quisiera para la gente que llega al aikido…»
Fuente:Diariodeavisos.com
Gracias a: Takemusudojo

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