Autodefensa: defensa contra uno mismo

O-Sensei creía que la verdadera victoria era sobre uno mismo, no sobre otros, y que el Aikido podría proveer un sentido o cura para un mundo en caos, confuso y conflictivo. Quizás, lo que el quiso decir era utilizar el entrenamiento del Aikido como una herramienta para sobrepasar nuestro propio centro de ignorancia. Uno de los elementos o conceptos del Aikido que me gusta es el de movernos antes que resistir e intentar de mover o cambiar a la otra persona. Enfocándonos en nuestro propio movimiento, la otra persona puede elegir seguirnos o separarse a su propia voluntad.
Una de las primeras cosas que aprendemos en Aikido es a relajar el cuerpo y calmar la mente. Para obtener lo mejor de nuestro entrenamiento, no negamos el ataque del uke y tampoco le decimos como debería atacar. El camino Aiki es el de recibir el ataque, aceptarlo y mezclarse con él. Nosotros lo redireccionamos antes que resistirlo. Tomamos en balance con fineza en lugar de hacerlo con fuerza. Intentamos controlar la situación y no hacer ningún daño.

por Lynn Seiser Published Online Traducido por Miguel Elias
Share