Mandevilla sanderi

El nombre de Mandevilla le fue dado en honor a  Henry John Mandeville (1773-1861), un diplomático británico y jardinero enviado a Argentina que llevó los primeros ejemplares de Mandevilla laxa a Inglaterra.

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La Dipladenia o Jazmín de chile o Mandevilla es una trepadora leñosa con follaje semi-persistente, de rápido crecimiento, frondosa, con flores muy llamativas en forma de trompeta de unos 7 cm, ligeramente perfumadas.

Exhiben un abanico de brillantes colores como el blanco, rojo brillante y rosa pálido o muy intenso. Las flores suelen durar en la planta unos diez días o incluso algo más.

La garganta de la flor es profundo y siempre en color amarillento. Tiene un largo periodo de floración, suele comenzar en el mes de mayo acabando con la llegada del frío en otoño.

Sus tallos son leñosos y tienen una predisposición natural a colgar o trepar, si se la deja, puede alcanzar hasta los 3 m. Sin embargo, con una poda cuidadosa y regular, se la puede controlar de modo que no exceda de un metro de altura. Hay que tratar que el suelo, sea muy ligero, suelto y algo ácido.

La Dipladenia joven debe ser tutorada con varillas o un enrejado de alambre, para que la planta se aferre a él a medida que crece.

Para que se desarrolle correctamente y produzca una gran cantidad de flores, la temperatura no debe bajar de los 18ºC. Necesita una atmósfera húmeda y caliente, el sustrato en verano tiene que estar húmedo pero nunca saturado de agua.
Hay que añadir abono líquido al agua de riego cada dos o tres semanas en periodo de floración. Pulverizar las hojas a menudo sin mojar las flores.

No le gusta el sol directo, la mejor ubicación es en semi-sombra al abrigo de otras plantas más altas. Cuando termina su floración se poda, quitando gran parte del crecimiento anual. Esto estimulará a la planta a crecer de forma compacta y a producir muchas flores al año siguiente.
Para propagar la Dipladenia, en primavera se cortan unos 8cm de los nuevos brotes, limpiando el látex que desprenden al cortarlos (con cuidado porque esta planta es tóxica) y se impregna el extremo de los tallos en hormonas de enraizamiento.

Conviene taparlos con una bolsa de plástico transparente y mantenerlos en un lugar cálido hasta que enraícen, aunque para que esto sea más seguro lo mejor es utilizar un propagador.

Las plagas que pueden atacarla son la araña roja y la cochinilla algodonosa, estas plagas se desarrollan en atmósferas secas.

Fuente Plantayflor

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