Sensaciones

(Fragmento) Por Sri Anirvan Todas las experiencias espirituales corresponden a sensaciones en el cuerpo. Son sólo una escala minuciosa de diversas sensaciones, comenzando por la de sentirse pesado como pedazo de tierra, para pasar muy gradualmente, en plena conciencia, a la licuefacción, luego a la de emanar calor. La última sensación es la de una vibración global antes de alcanzar el Vacío. Ciertamente el camino a recorrer es muy largo. Cada vez que un paso ha sido franqueado en la escalera ascendente, se produce una sensación de expansión en el espacio y de completa relajación. Esta sensación permite presentir lo que podría ser la experiencia del Espíritu puro (chit) trascendiendo toda cosa. Pero,¡ cuán lejos se está de esto!. Sin embargo, llegado ese momento, espíritu y materia parecen ser una sola cosa. Esta concepción viene de una muy antigua teoría de la purificación de los elementos. Que su disciplina actual llegue a ser para Ud., en la escala muy fina de las sensaciones, un medio de expansión y, por ende, de infiltración en todo cuanto le rodea, seres y cosas. Tenga la sensación profunda y muy fuerte de pasar de un elemento a otro. No hay otro medio. A este efecto, utilice la soledad que permite interiorizar muchas fuerzas. Toda concentración produce calor, y es este calor lo que se propagará. La verdadera disciplina personal(tapasya) no es más que una expansión de sí mismo irradiando calor producido por la concentración interior. Recuerde siempre que la sensación de expansión que puede experimentar es una irradiación. Permanezca en calma e irradie este calor. No haga preguntas. No pida más. Viva plenamente estos instantes. Esta irradiación es, en sí, Shaktí, un instante de conciencia viviente, es decir, una experiencia directa que se instala en Ud. Su sensación es la prueba de ello, una certeza que ya no puede borrar de su memoria. En la meditación, el cuerpo entero es utilizado para descubrir una sensación de expansión que, durante un largo período, es la meta última. El trabajo sobre el cuerpo es delicado y se efectúa según datos muy precisos, pues cada movimiento, voluntario o involuntario, busca la calma, es decir una sensación de conciencia física. El motivo del primer estado a alcanzar es la solidez perfecta del cuerpo inmóvil. Para llegar a ello, todos los pensamientos, uno tras otro, son conducidos al cuerpo, a su forma, pero, equilibrio, etc. No hay ningún otro pensamiento. Este estado es simbolizado por la materia “tierra” en el corazón de la cuál, a pesar de su pesadez y opacidad, existe ya una vibración. La atención dirigida se fijará gradualmente en la imagen de una copa. El cuerpo se volverá esta copa hecha de una materia pesada que contiene vino efervescente. Muy centrada sobre sí, la atención penetrará en el cuerpo, descenderá muy bajo a lo largo de la columna vertebral hasta establecer en el centro de gravedad una impresión de gran pesadez. El cuerpo entero ha llegado a ser duro como una estatua de formas muy puras. En ese momento se descubre que todos los movimientos internos dentro de la copa: efervescencia, agitación, ideas, imágenes, son producidos por el cuerpo. La estabilidad del cuerpo es un estado en sí. Es por eso, que para alcanzarla más fácilmente, se ha dado tanta importancia al alimento y a la higiene del cuerpo.