Como seres humanos falibles, podemos sentir ocasionalmente remordimiento, o incluso vergüenza por las cosas que hemos hecho y con la misma frecuencia, por las cosas que podríamos y habríamos podido haber hecho. La moderación y el sentido compasivo de perdonarse a uno mismo, sin duda nos puede ayudar a conseguir pasar estos tiempos de auto recriminación, lo que permite una nueva oportunidad para hacerlo bien la próxima vez. Esto es como debe ser, porque el principio de la renovación es una constante y un derecho.
Jedoch, no debemos perder la lección, de la misma forma que hayamos permitido la oportunidad del desliz. Es el tiempo una ventaja que casualmente despilfarramos sin pensarlo o es en realidad un medio de grabación para la observación de los comportamientos actuales y pasados, que realmente debemos re-examinar constantemente y extraer importantes lecciones de cara al futuro? Tal vez ambas cosas, aunque estoy a favor de la segunda opción.
Hablando sólo por mí, me sentí atraído, en parte, por los principios de Aiki y del Aikido, en aquellos aspectos particulares que hablaron de la responsabilidad propia, de fortalecer las responsabilidades interpersonales y cultivar las actitudes intransigentes de la acción correcta. Tengo que mantener mi compromiso incondicionalmente y sin la necesidad de un compromiso sin sentido. No voy a sentir remordimientos por cualquier acción que emprenda con la mejor de las intenciones y siendo consciente de los hechos y circunstancias que tenía disponible en ese momento.
Este es el temple de un guerrero, creo, y la principal fuente de orgullo justificado, fuerza adquirida honestamente, respeto a sí mismo ganado y de un auténtico sentido del honor. A partir de esta base, los conocimientos, las técnicas y la suma total de mis experiencias de entrenamiento tienen un significado más profundo y darán lugar a un mayor sentido de propósito. Sentí físicamente la técnica del Fundador sólo una vez en mi vida. Jedoch , aún puedo sentir su propósito, pasión y su visión de un verdadero Budo, cada día del que soy bendecido para agregar a mi total. Por eso sigo comprometido con el Aiki y con mi aikido, a pesar de los muchos fracasos y desventuras que parezco recoger a lo largo de mi camino. Acepto esto como el precio que hay que pagar para mejorar y para crecer como individuo.
Irónico y extraño que “Aikido” sea ampliamente conocido por ser el “Arte de la Paz”, una manera de ganar sin pensar en ganar y para resolver los conflictos sin necesidad de entrar en combate. La historia misma sirve para descubrir el mito de ese lamentable error, al ser testigos de las principales divisiones de ideologías, sistemas antagónicos de entrenamiento y la aparición de aparentes titanes de Aiki que se proclaman iguales a los maestros del pasado, mientras que actúan como presumidos parasitarios. Tal vez se trata de un defecto en la ingeniería humana que exista este tipo de comportamiento delirante centrado en el yo, pero esto ha sido así durante un millón de años. Por qué la mayoría de los aunque sinceros estudiantes del regalo del Fundador, apoyan estas anomalías, por no hablar de los falsos profetas, sabiéndo tal vez mejor que su liderazgo adquirido, que algo grande está mal. Todos bebieron el seductor Aide Kool que les obligó a ser irreflexivos y tan ciegos y obedientes, para seguir el ejemplo de estos falsos profetas hacia el caos del pensamiento y la acción equivocada ?
Por cualquier parte que pude haber jugado en esta parodia histórica, me siento muy humilde y siento un adecuado remordimiento. Parafraseando al personaje de Banderas Ahmed Ibn Fadlan, en la película “The Warrior XIII “, su oración antes de la batalla final dice ” por todo lo que deberíamos haber pensado, pero no hemos pensado, todo lo que deberíamos haber dicho, pero no hemos dicho, todo lo que deberíamos haber hecho, pero no hemos hecho , , , , rezo (a ti, Gott ), por el perdón”. Como líder solitario en Aikido, yo debería haber hecho mucho más por el arte que me encanta. Si los hados lo permiten, es mi misión de tomar ukemis re -energizantes y volver al camino correcto del progreso.
He decidido no criticar a los demás, aunque sus obras, y su comportamiento, parecen seguir siendo juego limpio. Voy a respetar y honrar a los intentos de otros para construir y compartir sus ideas de Aikido, aunque voy a abstenerme de apoyar o respaldar tales intentos con los que no llego a estar de acuerdo. He decidido hacerlo mucho mejor en el departamento de ” due diligence “, investigando más a fondo los conceptos y enseñanzas que descubro y comparto. He decidido no hacer “ningún daño” a aquellos con los que no estoy de acuerdo, o que adopten las medidas que considero perjudiciales para el Aikido que defiendo, porque realmente no saben lo que hacen. He decidido hacer lo mejor, a vivir con los ejemplos establecidos por el fundador y de otros genios que he descubierto a lo largo de mi camino y vivir en la belleza. Y voy a estar contrito como es apropiado, pero no voy a sentir ningún remordimiento por haber hecho mi mejor esfuerzo cada vez. No permitiré que pesar, azoramiento o sentimiento de vergüenza inútil me disuadan de mi atención y mis metas. Porque yo sé ahora, que simplemente sentir remordimiento por mis defectos, no me ayudará en mis esfuerzos, ni me animará en mi pensamiento innovador, o proporcionará la sabiduría que sólo la persistencia y el compromiso me van a dar.
Francis Y Takahashi
Traducción Carina
Fuente Aikido Academy USA
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