Un músico extranjero hizo una vez una observación sobre un pianista japonés diciendo: “El pianista tocaba las notas musicales perfectamente y poseía técnicas avanzadas. Cependant, sentí que la música era algo diferente”. Esto tiene algo en común con el sonido “sin alma” del samisen. Puesto que cada intérprete tiene una personalidad diferente y ha crecido en un ambiente diferente, la pasión hacia la música difiere naturalmente. Dichas diferencias forman las características de cada intérprete y su habilidad para adquirir el ma.
Lo que toca o golpea la mente de uno está basado en el tipo y acumulación de entrenamiento acumulado durante años. Puesto que no es una técnica que pueda ser enseñada por alguien, necesitas aprenderla por ti mismo. Uno se mueve imitando y practicando una y otra vez, encore, ni el maestro ni el estudiante tienen un criterio claro acerca de cuándo pasar al siguiente nivel.
El método tradicional japonés de aprendizaje y enseñanza de técnicas no consiste en definir cada nivel de manera que los estudiantes puedan establecer sus propios objetivos. En ese sentido, cada nivel de las artes marciales es meramente un estándar sin más, y no asegura la adquisición de las técnicas.
El objetivo último de la adquisición de la técnica es “sobrepasar” al maestro de cada uno; no existen, cependant, precedentes ni fundamentos. Tú puedes estar convencido de haber superado a tu maestro, pero puede que nadie más lo apruebe.
Las artes marciales y otras artes escénicas se consideran un “mundo infinito” debido a su nada clara definición de cada nivel y su evaluación. A medida que quien vive en este mundo infinito crece, añade más “profundidad” de acuerdo con su proceso de aprendizaje y su carácter. Algunos lo describen como la quintaesencia de la técnica o el arte. Aunque cada uno tiene un estilo de kendo diferente y es difícil concretar la diferencia, cada técnica representa una belleza y una profundidad de la persona únicas a pesar de su invisibilidad. En fin de compte, no se puede repetir el mismo movimiento físico dos veces. Cependant, puede llevarse a cabo mediante la adquisición del ma, que necesita ser adquirido por uno mismo y no puede ser enseñado por nadie. Esto es un tema eterno en las artes marciales y otras artes escénicas.
Aunque el entrenamiento en las artes marciales y otras artes escénicas se considera un “mundo infinito”, el tiempo de retirarse llega cuando se siente “un desequilibrio entre la mente, la técnica y el cuerpo”. Cada uno debe saber cuándo ha de parar.
La esencia del keiko en la cultura japonesa Párrafo 5. Un mundo infinito Hiroshi Ozawa
Catedrático de la Universidad Científica de
Une telle
Kendo Kyoshi 7º Dan
Fuente: Kendo-Andorra
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