5 Escuela

El 1 de abril de 1935 comencé la escuela. Mi madre me hizo un cucurucho de bonitas golosinas y me llevó a las ocho a la Escuela de Drusenberg, bastante cerca de casa. La escuela era un edificio de ladrillos, que se dividía en dos escuelas, una de las partes era la escuela católica, la otra la escuela protestante.


Mi primer maestro se llamaba Storch, un buen hombre. De mi vida escolar en general lo que puedo decir de mí es que aprendía con mucha facilidad, pero era un alumno mediocre. Tuve la visión equivocada de la juventud, que teníamos que aprender para el profesor y no para nosotros. Hacia los deberes con bastante rapidez para poder ir a jugar al aire libre. Mientras vivíamos en la calle York, cuando jugaba a las cogidas casi me atropella uno de los escasos coches que circulaban en aquella época. El hombre frenó poco antes de que me hubieran cogido las ruedas. La culpa, por desgracia, se la dieron a mi hermana, que debia cuidarme. Creo que le dieron una buena paliza por mi descuido .

Bueno, yo sólo había estado un año en la escuela Drusenberg, cuando mis padres se mudaron. En la calle Riemker viviamos en un ático. Sólo podiamos caminar erguidos en el medio de la vivienda . Allí vivimos durante tan poco tiempo que hoy ni siquiera recuerdo si habia cambiado de escuela.

Pronto nos trasladamos a Bochum Linden, donde vivíamos en una casa pequeña «Am Roderschacht 34». El Roederschacht era una calle lateral de la calle Hattinger, una de las principales calles de Bochum. Desde la calle Hattinger el Röderschacht iba de forma bastante empinada hacia abajo quizá 600 metros de largo. Toda la calle era un asentamiento minero, todas tristes casas de ladrillo de 3 plantas. Sólo había tres viviendas unifamiliares, una alquilada por mis padres, al lado vivía el carnicero Uckmann y en diagonal enfrente un tendero llamado Dämpfer.

Nuestra casa era la penúltima casa en la parte inferior, después venía un prado y un poco más allá las vias del ferrocarril. Las barreras cerraban el camino cuando llegaba el tren. Justo al lado estaba la casa del guardián del tren. Y detrás de la barrera había un bar.

Nuestra casa era un trocito de tierra donde mi padre hizo un jardín. Con el tiempo cosechabamos casi todos los vegetales, además de uva espina, fresas y grosellas. Mi padre hizo un gallinero y un par de jaulas para conejos. En el otoño se cocían las verduras y frutas y envasados en frascos. Se hacia chucrut, se guardaban zanahorias en una caja de arena y las papas en el sótano y se compraba una tonelada de carbón, entonces podía venir el invierno.

Cuando caía la primera nevada, nuestro camino era una pista para trineos. Desde la cima bajamos la pista en un ritmo vertiginoso, pero lamentablemente teniamos que volver a subir y no era fácil con la pendiente y el hielo. Pronto me hice amigo de nuestro vecino Uckmann. En el otoño iba de casa en casa para matar a los cerdos. Mucha gente tenía un cerdo todavía y se mataban en la casa. Entonces siempre había Wurstebrühe(carne picada) que se espesaba con cebada, y se comía luego como Mett(especie de paté grueso).

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